Consejos para hacer crecer tu negocio
Si hay algo que hace que sea bueno trabajar con empresas pequeñas, es el trato personalizado que pueden ofrecer.
Para muchos clientes, las relaciones estrechas son fundamentales: quieren tratar con personas que conozcan su nombre y que se tomen el tiempo necesario para comprender realmente sus deseos y necesidades. Esto es algo en lo que las grandes organizaciones, por su propia naturaleza, pueden tener dificultades.
Sin embargo, para muchas microempresas el reto está en cómo mantener este nivel de servicio a medida que se consolida el éxito y crece la compañía.
He aquí nuestros mejores consejos para crecer, pero sin perder ese toque personal.
Tener un plan de negocio claro
Esto puede parecer obvio, pero sorprenderá el tiempo que los dueños de empresas pequeñas dedican a afrontar los retos del presente; a veces, tanto que no tienen la oportunidad de elaborar un plan para el futuro.
Pero poner en marcha un plan de negocio aumentará significativamente sus posibilidades de lograr un crecimiento exitoso, por lo que merece la pena dedicar tiempo a sentarse y pensar de forma realista en sus objetivos. La idea es crear un plan que detalle dónde se encuentra ahora, dónde quiere estar en 3-5 años, y qué tiene que hacer para conseguirlo.
¿Qué significaría ampliar la empresa? ¿Ganar nuevos clientes? ¿Añadir nuevos productos al inventario? ¿Ofrecer nuevos servicios?
Por supuesto, esto tendrá que ir acompañado de una investigación sobre el mercado en el que se planea expandirse, en la que se respondan preguntas como la necesidad del cliente que va a satisfacer o cómo lo va a hacer mejor, o al menos distinto, que la competencia.
Si es posible, estaría bien mantener algunas conversaciones con clientes potenciales para hacerse una mejor idea de lo que estarían interesados en comprar. Si se trata de la típica microempresa que mantiene relaciones muy estrechas con clientes, se puede hacer en una conversación casual, en lugar de realizar una encuesta formal.
Aprender a delegar
Los propietarios de una microempresa, puede que se estén acostumbrado a gestionar los aspectos de la empresa. Esto puede haber contribuido en parte a que fuera tan buena.
Sin embargo, al haber creado la empresa de la nada sin ayuda de nadie, a muchos empresarios les resulta difícil ceder cierto grado de control a otras personas. Pero esta es una parte inevitable de la ampliación. Por difícil que resulte, para lograr un crecimiento significativo hay que aprender, por ejemplo, a delegar en otras personas; también a automatizar los flujos de trabajo y los procesos, en la medida de lo posible.
Otra razón por la que esto puede ser tan difícil es que, además del cambio de mentalidad que supone, también hay mucho trabajo y riesgo a la hora de incorporar nuevas personas que ayuden a la expansión.
Automatizar los procesos no esenciales
Por muy sencillos que sean los servicios o productos que vende una empresa, siempre hay que realizar una gran cantidad de tareas administrativas en muchas áreas diferentes para que todo funcione sin problemas. Si no se tiene cuidado, a medida que la empresa crece esto puede descontrolarse fácilmente y afectar a la calidad del servicio al cliente.
Aquí entran en juego los servicios de automatización.
Ya se trate de gestión de contratos, marketing, contabilidad y nóminas, o de cualquier otro proceso empresarial, existen plataformas basadas en la nube que permitirán externalizar estas funciones.
Al final, la automatización de los procesos que no son necesarios significa que hay menos trabajo que hacer, por lo que se puede dedicar tiempo a ofrecer a los clientes la mejor experiencia posible, o al pensamiento estratégico mencionado en el punto 1.
La impresión es otro ejemplo de área en el que los servicios de suscripción pueden ayudar. Con la suscripción EcoPro de Brother, que permite distribuir el coste de funcionamiento de una impresora en una serie de pagos mensuales asequibles, toda la tinta o el tóner que se necesite se entregarán cuando sea necesario, por lo que no habrá que preocuparse de que se agoten ni de pedir recambios. Esto significa que se puede seguir imprimiendo sin pausa para mantener contentos a los clientes, sin tener que preocuparse por la logística de mantener la impresora en funcionamiento. Además, mientras se mantenga en vigor la suscripción a Ecopro, la garantía de los productos de impresión es vitalicia, por lo que los posibles problemas con el funcionamiento de los equipos de impresión están cubiertos, así que otra preocupación menos.
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