8 factores para ganar en salud en tu lugar de trabajo
Imagina un futuro en el que los empleados salen de la oficina con tanta energía como cuando llegaron.
Si bien esto puede parecer un gran salto dentro del contexto actual, en poco tiempo las innovaciones tecnológicas y científicas podrían hacer de esto una realidad.
Y lo que es más impresionante, estos wearables (dispositivos vestibles) hablarán con sensores que controlan todo el entorno de trabajo. Mediante el ajuste de variables como la temperatura, el oxígeno y los niveles de luz, será posible proporcionar un entorno optimizado para el máximo rendimiento individual en todo momento, incluso contrarrestando el bajón que se produce por las tardes.
Potencial ilimitado: una imagen de nuestro futuro laboral saludable en ocho tendencias
1) Tecnología wearable (vestible)
Las maneras de optimizar el rendimiento de los trabajadores mediante soluciones poco tecnológicas se verán sustituidas en algún momento por la tecnología de alto nivel construida alrededor de la tecnología vestible.
Los dispositivos controlarán todo: la frecuencia cardíaca, la presión arterial, los niveles de azúcar en la sangre, la hidratación, la oxigenación, la alimentación e incluso los indicadores de estrés. Estos mismos dispositivos ayudarán a los trabajadores a mantenerse en su mejor momento de manera constante. Alertas ante necesidades de hidratación o ejercicio se convertirán en habituales.
Y lo más impresionante, este tipo de tecnología será capaz de hablar con sensores que controlarán todo el espacio de trabajo. Mediante el ajuste de variables como la temperatura, la ventilación y los niveles de luz, es posible proporcionar un entorno optimizado para la concentración y el rendimiento individual en todo momento, incluso contrarrestando el bajón de rendimiento que se produce frecuentemente por las tardes.
2) El espacio mental, la salud mental y la desintoxicación digital
Cada vez se comprende mejor el vínculo entre el bienestar de los empleados y la productividad. Teniendo esto en cuenta, hay que destacar que, en el Reino Unido, el 60% de los 26,8 millones de días laborables perdidos por enfermedades relacionadas con el trabajo en 2017-18, fueron atribuibles al estrés, la depresión o la ansiedad1.
Iniciativas como la capacitación en primeros auxilios para la salud mental están cerrando brechas de conocimiento y creando espacios seguros, confidenciales y de intimidad en el trabajo. Todo ello ha conseguido que los problemas de salud mental ya no sean un tabú y se ponen en el mismo nivel que las enfermedades físicas.
Conseguir que las personas abran su mente será una de las cosas más importantes, aunque la tecnología seguirá jugando un papel vital. Los problemas que muchos trabajadores tienen para desconectar del trabajo se solucionarán con sistemas que desactiven de manera automática la WiFi y los smartphones para garantizar tiempo de inactividad digital.
Además, cuando un software controle completamente nuestro día a día, conseguirá, de manera algo irónica, programar reuniones y tareas de manera inteligente para minimizar el tiempo delante de la pantalla, garantizar cierta flexibilidad y darnos un descanso de la tecnología.
3) Diseño del bienestar en el lugar de trabajo
La mayor fluidez espacial y unos mejores niveles de luz natural son cada vez más frecuentes, pero el refinamiento del diseño tiene mucho más que ofrecer a la oficina.
A un nivel más específico, los trabajadores podrán beneficiarse del uso de sillas y escritorios para estar de pie, optimizados para ese tipo de posturas y que han demostrado aumentar la concentración por las tardes. Si añadimos algo de descanso mental a la fórmula, los empleados también tendrían acceso a cápsulas o espacios para dormir o meditar.
Las comodidades también serán parte de este cambio. Se espera ver instalaciones como gimnasios, spas y salas de juegos de forma más común en los lugares de trabajo.
4) Estímulos científicos
Mejorar el bienestar será más fácil gracias a estímulos inspirados en la naturaleza como la iluminación circadiana, que sigue los ritmos naturales de vigilia para aumentar la energía y la positividad.
La ciencia también jugará un papel importante en el bienestar. Los tanques de privación sensorial, que ya tienen algunos spas, se están mudando poco a poco a las zonas de trabajo. Flotar en agua salada a temperatura corporal en una cámara insonorizada es una experiencia meditativa y sensorial. Los estudios sugieren que mejora la imaginación y la intuición, al tiempo que reduce la ansiedad. ¿El beneficio para los negocios? Trabajadores más descansados, creativos y productivos.
5) Más verde para restaurar el equilibrio natural
Habiendo sido diseñadas tradicionalmente para empresas, no para trabajadores, las oficinas no son actualmente entornos naturales y armoniosos.
En las próximas décadas, las plantas y otros elementos naturales como el agua se introducirán cada vez más, lo que nos ayudará a conectarnos con la naturaleza y desbloquear numerosos beneficios adicionales.
Además de mejorar la calidad del aire, las plantas nos calman, vigorizando nuestra mente para impulsar nuestras respuestas cognitivas. Esto nos hace ser más creativos.
Alejándose del típico entorno gris sin textura, los edificios de oficinas contarán cada vez más con paredes exteriores vivas y relajantes jardines en la azotea que brindan un lugar para reunirse, trabajar o hacer tormentas de ideas.
6) Fomentar el bienestar: disuadir las enfermedades
La nutrición ocupará un lugar destacado en los menús de la oficina, no solo para aumentar la concentración y el rendimiento a través de la optimización de la dieta, sino para estimular nuestro sistema inmunológico y protegernos contra las enfermedades.
Cuando los wearables se conviertan en algo habitual en el lugar de trabajo, la manera de alimentarnos estará guiada de forma precisa. A los trabajadores con niveles bajos de potasio, por ejemplo, se les podría pedir que coman un plátano, mientras que a los que se sienten deprimidos se les puede recomendar que consuman jengibre fresco para estimular su sistema inmunológico. Todo esto se gestionará a través de restaurantes saludables que ofrecerán menús variados.
Las personas que enfermen serán disuadidas de acudir al trabajo. Las políticas y la legislación se readaptarán de acuerdo con un reconocimiento más amplio del impacto perjudicial que supone exponer a la plantilla a los gérmenes y las enfermedades.
Las mejoras en cuanto a bienestar y nutrición reducirán las bajas laborales por enfermedad, aumentando la productividad.
7) Texto predictivo: reescribiendo las posibilidades del servicio al cliente
Durante la próxima década, programas como Start Compose para Gmail de Google perfeccionarán la técnica de redactar respuestas automáticas por correo electrónico a los clientes, convirtiendo las respuestas rápidas en algo habitual.
La tecnología predictiva también mejorará los procesos de gestión de clientes B2B y B2C con toques personales, mejores experiencias digitales y organización en la nube.
Por lo tanto, los empleados estarán menos estresados, ya que la tecnología reducirá la cantidad de situaciones difíciles a las que tienen que hacer frente.
8) Hacer más en menos tiempo
Puede sonar contradictorio, pero las semanas largas son menos productivas que las cortas, principalmente porque las cortas reducen las situaciones de estrés, las bajas por enfermedad y la pérdida de talento.
La clave es trabajar de manera más inteligente, no más dura. Esto está dando resultado en aquellos países que fomentan la reducción de las horas de trabajo. El país más productivo del mundo en 2017, Luxemburgo, tiene una envidiable semana laboral promedio de 29 horas. Los ciudadanos de otros países de alta productividad como Noruega, Suiza, Islandia y Dinamarca también trabajan un número de horas similares2.
Esta información está extraída del informe “La oficina del futuro” que ha lanzado Brother para inspirar a los responsables de negocio con ideas que impulsen la productividad en sus empresas y les ayuden a prepararse para lo que está por venir.
Fuentes:
1 Health and Safety Executive, Health and Safety at work summary statistics for Great Britain in 2018
